“Es mejor escribir para sí mismo y no tener público, que escribir para el público y no tenerse a sí mismo”

Cyril Connolly

miércoles, 31 de agosto de 2011

LAS CARGAS.




Elegí esta carta de Osho porque la imagen me parece muy significativa y como suele decirse habitualmente, una imagen vale más que mil palabras. Esta es una carta del elemento aire y por lo tanto representa a la mente. Muestra como el camino a este ser se le hace muy difícil y complejo, ya que no solo va cuesta arriba escalando una montaña, sino que lleva a otros a cuestas, eso le suele suceder a la mayoría de las personas frecuentemente.

La mente es la que comanda, la que nos dice todo el tiempo que hacer, la que proporciona la lógica y el intelecto, es una herramienta muy poderosa que posee el ser humano y sin embargo usualmente la usa en su contra y así como es capaz de construir cosas maravillosas y ayudarnos a realizar todos nuestros proyectos, como enemiga es implacable y devastadora.
No hemos aprendido a aquietar nuestra mente al menos como habito y es por eso que esta “encendida” todo el tiempo, en un dialogo interno perpetuo. Si probamos detenernos un segundo nos daríamos cuenta que constantemente pasan pensamientos por nuestra mente, uno tras otro, recordando cosas, interpretando hechos, tomando posiciones y exigiéndonos, tareas, logros, pendientes etc.


Cuál es la causa de que viajemos por la vida sintiéndonos mal y con carga extra?

Es un tema que rebasa lo individual y llega hasta lo cultural o mas allá tal vez, no hemos aprendido a respetarnos ni a querernos a nosotros mismos, ni hablar, de perdonarnos en nuestras debilidades y flaquezas, perdonarnos no quiere decir tomarnos las cosas que hicimos mal con liviandad, negligencia o ser consecuentes, sino asumir la responsabilidad y actuar conforme a ello. Reparando la falta si es posible y en los casos que nada quede por hacer incorporar la experiencia como aprendizaje, siendo mejor la próxima vez es una forma de reparación también, pues lo sucedido no habrá sido en vano.
 La mente en estos casos actúa como un dictador, recordando de modo persistente como si fuera un golpe de martillo cada vez, llegando a paralizarnos y confundirnos actuando según todas estas directivas mas la óptica de terceros que ya se han encargado de censurar lo ocurrido, desde que el individuo es pequeño sucede esto con frecuencia, comportándose conforme a la aprobación de los padres primeramente, luego los educadores, etc. Así vamos por la vida en función de todo el entorno, porque todo se trata de la aceptación, de agradar, de ser amado y nos vamos olvidando de nosotros mismos, de lo que necesitamos verdaderamente o no. Pero no es un tema parental únicamente pues a su vez ellos también fueron instruidos de esta manera y esto se trasmite de generación en generación. La educación recibida está basada en la culpa y el miedo, en los castigos divinos en las religiones y el castigo social de la desaprobación o en su defecto la retirada del afecto de quienes amamos. 
El miedo cobra fuerza en la mente donde nos insta a actuar en base a todos estos parámetros, entonces cargamos con ideas, personas, sentimientos destructivos. Salir de estas situaciones requiere de una fuerza de voluntad importante, porque todo el entorno se esforzara por “volvernos al lugar” las personas no están acostumbradas a aceptar a los individuos que son “diferentes” siempre tratan de adaptar a los seres a sus maneras, eso se ve con más claridad en la familia, donde el que es “diferente” pasa a ser la oveja negra. Esto genera un conflicto en donde el individuo pasa a ser estigmatizado de por vida y si no se está bien parado podría ser en deterioro de la persona de su autoestima y en consecuencia de su probable futuro desventurado. También hay quienes se sostienen fuera de los parámetros establecidos, donde la fuerza interna es enorme ya que “salir de los círculos” familiares por ejemplo, es un desafío constante.

Hemos aprendido a ser más mentales que emocionales, mas estrategas que espontáneos, la reconciliación seria la conexión de la mente con el corazón, este sentimiento de separatividad es la causa de tanta perturbación y de tanta desdicha, de que tanta gente gire constantemente en una rueda toda su vida, sin saber por dónde, ni cómo salir. Se esta tan acostumbrado a estos sistemas que ni siquiera los notamos, porque  aquello que hemos tenido toda la vida nos parece “normal” entonces...por qué observar o inquietarnos en cambiar algo que siempre estuvo ahí, donde siempre se nos dijo cómo comportarnos y que hacer o como, lo más pernicioso de todo esto es que hay personas que no sabrían como actuar sin estos paradigmas establecidos y necesitan de estas estructuras sociales y morales impuestas aunque sean en su desventaja personal. Están tan marcadas y tan sometidas que el miedo a pensar por sí mismas es inadmisible, donde ya la responsabilidad estaría en juego y correría por parte de la persona y no de un grupo. Las individualidades en lo cotidiano escasean, como el sentido crítico desarrollado así como también las personas que siguen su propio sentir interno, donde el corazón comanda seguido por la serenidad y sensatez de la mente y no al revés.



 El corazón nunca se equivoca, la mente sin embargo suele ponernos trabas y cargas que ni siquiera son propias, sino en función de otros. El mayor poder del ser humano está en el sentir, en la emoción, en el corazón, en el amor, si bien la mente es creadora es simplemente una herramienta, el amor es la esencia pura de todos los seres. La mente dirige pero no tiene la fuerza y el poder transformador del amor, la mente proyecta y crea pero no trasmuta nada de lo que ya es o se ha creado. Lo idóneo sería el equilibrio entre ambos y ante cualquier incertidumbre que se deba resolver…. la mente nos reprimirá o animara, mientras que el corazón nos dará la plenitud de haber hecho lo mejor posible sin cuestionarnos, la elección siempre estará en nuestras manos dependiendo de la capacidad que tengamos de desenvolvernos entre estas dos fuerzas.

"Manten un equilibrio entre mente y corazón, usa la mente para pensar y el corazón para decidir"


domingo, 28 de agosto de 2011

REMEDIO QUE CURA TODAS LAS ENFERMEDADES.


Cura tibetana del ajo, es la cura mas eficaz, barata y sencilla que existe, es conocida desde la antiguedad, es corta pero sus beneficios no tienen fin

sábado, 27 de agosto de 2011

LOS 4 ELEMENTOS



Todo en el universo conocido está formado por cuatro elementos básicos o energías primordiales, desde cada manifestación física por pequeña o grande que sea hasta el ser humano.
 Y cada elemento contiene trazas de los otros tres en tal proporción que definen su carácter y naturaleza. A modo de ejemplo un cristal de cuarzo está compuesto por el elemento tierra como su principal componente y también contiene rastros de agua, fuego y aire, lo que lo diferencia de un árbol es la proporción y la combinación de estos elementos. Así sucede en todo lo creado. Cada elemento es diferente en su estructura, pero logran conciliarse para manifestar la vida.

Cada ser humano está constituido por estos 4 elementos, donde el elemento predominante define el carácter, algunos tienen el temperamento del fuego, otros del agua, aire o tierra. Existe en realidad una correspondencia mayor, cada parte del cuerpo por ejemplo está regido por un elemento en particular, el cabello es análogo al elemento aire, así sucesivamente cada parte tiene su regente.

TEMPERAMENTOS SEGÚN EL ELEMENTO PREDOMINANTE

AGUA – Es el elemento del entendimiento, de la empatía, es receptivo, sabe escuchar, cede, se adapta, acepta.
Emociones: Ternura, gratitud, culpa, cuidado, vergüenza.
Tono de voz: Dulce, cálido, con silencios.

AIRE -  Es el elemento de la fluidez, del desapego, de la liviandad, cambia de dirección en cualquier momento. Nos permite cambiar de opinión, hace posible el sueño y el soñar.

Emociones: Liviandad, inseguridad, irascible, voluble e influenciable.
Tono de voz: Alto, suave e inseguro.

FUEGO – Es el elemento que reacciona más rápidamente, con entusiasmo, es el que siempre está viendo posibilidades. Es impetuoso, invade espacios, tiene presencia fuerte.

Emociones: Pasión, ambición, envidia, seducción, competitividad, decisión.
Tono de voz: Seguro, fuerte.

TIERRA – Es el elemento de la fuerza, de la resistencia a los cambios, inflexible, nos hace echar raíces, obtenemos la voluntad de mantenernos en proyectos, relaciones, ideas y fijar límites.

Emociones: Calma, estabilidad, tristeza, arrogancia, cautela.
Tono de voz: Claro, sin mayor expresión.


El agua es a las emociones en el ser, como el aire es el pensamiento, el fuego es la voluntad, la fuerza, la energía y la tierra lo concreto, lo físico y palpable. La buena salud es la armonía entre estos elementos y el desequilibrio provoca desajustes que terminan en malestares y enfermedades, psíquicas y emocionales, repercutiendo ulteriormente en el cuerpo físico (tierra).
A nivel esotérico o en la magia aplicada cada elemento tiene dos propiedades fundamentales, la primera le es inherente, la segunda como mediadora entre dos, así:

El fuego es caliente y seco
La tierra es seca y fría
El agua es fría y húmeda
El aire es húmedo y caliente

Debido a que poseen cualidades opuestas es que dos elementos son contrarios entre si, como el fuego con el agua y la tierra con el aire. También se clasifican en pasivos y activos, la tierra y el agua pertenecen a los primeros y el fuego y el aire a los segundos. La combinación y el arte de manipular estos elementos hacen de cualquier acto mágico una realidad.  Asimismo quien no controle sus propios elementos dentro de su microcosmos (cuerpo humano) poco podrá obrar con éxito duradero cualquier acto de magia, pudiendo caer victima de sus propios actos. El mago debe ser impecable y coherente en su obrar, sus pensamientos y emociones.

“Estos son los principios y el origen de todos los cuerpos, de su composición, de sus virtudes, y de sus efectos maravillosos, de manera que quien quiera conozca las propiedades de los elementos, y de sus mezclas, podrá fácilmente operar cosas maravillosas y asombrosas, perfeccionándose en la Magia Natural.”
                                                                         CORNELIO AGRIPPA.

lunes, 22 de agosto de 2011

LA MUERTE.


Muchas son las interrogantes que despierta este término, desde el desconocimiento, el miedo, las dudas, el mito, la soledad y frialdad que surgen de esta palabra.
Es una de las tantas cosas que la gente prefiere evitar hablar, como si mencionarlo lo estuviera atrayendo y la sola idea resulta perturbadora en nosotros y ni hablar de seres queridos.
La muerte vista como algo definitivo y radical, realmente resulta temeraria, si ese fuera el caso, sin embargo resulta que no lo es.

Es un asunto de desconocimiento absoluto lo que nos hace pensar así, ya que hemos sido programados a pensar en tal sentido, es un tema de educación, de condicionantes una vez más que se nos ha impuesto como sociedad, como ser humano limitado. En otras culturas la muerte tiene otro significado, se le da otra importancia y se celebra de formas diferentes que en occidente. La muerte es una transformación en la que el alma abandona el cuerpo en pos de la cadena evolutiva, es una ascensión, donde lo que vemos que queda es solo el cuerpo físico, no es el ser que lo habito, el cuerpo físico es simplemente el cascaron, el contenedor de algo mayor “el ser” que es en esencia inmortal. Es una metamorfosis en la que renacemos en otro estado del ser y de conciencia. Venimos a esta existencia a este plano con la posibilidad de perfeccionar la materia desde lo más sutil que es el espíritu la esencia es perfecta, la divinidad manifestada en cada uno de nosotros y la ardua tarea es la de sutilizar desde lo más denso que es lo físico hacia la comunión con el espíritu.

Para ello se emprende el viaje de la muerte y el renacimiento una y otra vez como medio para lograrlo, así que la muerte en sí misma no es un término  ni un final, tan solo es un pasaje entre estados y planos. Igual que cada noche sucede cuando el cuerpo duerme y descansa, esa es una pequeña muerte que nos sucede a diario y sin embargo no la encontramos fatal, la única diferencia con la muerte es que es más espaciada en el tiempo y no tenemos referente de una vida a otra. Al despertar cada mañana volvemos a estar ahí, aun cuando no recordemos por donde estuvimos, ni que hicimos, lo que parece importar es que volvemos a estar, a existir, a diferencia de la muerte que es más radical diríamos por no tener referencias concretas en la mayoría de los casos, de ahí surge: el miedo a lo desconocido, a dejar de existir, pero el que teme solo es la personalidad, el espíritu es ininmutable. Las personas que recuerdan los sueños con claridad suelen tenerlos hasta extremadamente vívidos, donde interactúan con otros, donde realizan tareas, es otro estado otro plano.

Mas allá de lo que sucede después de la muerte inmediatamente, pues hay tantas versiones como oradores y es algo que para la mayoría de nosotros es difícil de comprobar, lo que sí es una realidad es que uno no deja de existir o se desintegra en partículas o se va a un lago de azufre en el que lo castigaran por toda la eternidad, esos son pensamientos de mentes limitantes que solo se crearon para evitar que el ser humano alcance el total de su potencial….y que mejor que manejarlo a través de la mente, del miedo, o de la ignorancia?

Existen muchos mitos para sostener todas estas limitantes, desde las imágenes inclusive, LA PARCA o EL ANGEL DE LA MUERTE, lo cierto es que cada uno muere de acuerdo a como ha vivido, uno es consecuencia directa de lo otro, luego de haber realizado lo que tenía que hacer de acuerdo a su propia evolución. Es un periodo de descanso, porque lo difícil no está “arriba” en el cielo o donde cada uno crea que va, lo difícil es acá “abajo” que es donde se realizan los aprendizajes, en la interacción con el resto del mundo y en el autoconocimiento, allí es donde se producen los avances o los retrocesos.
La vida es lo difícil de encarar no la muerte, ella viene sola y como un proceso natural que todos atravesaremos antes o después, pues nada escapa a esta ley de transformación, basta con observar la naturaleza, los ciclos, los tiempos, los mundos, los universos, todo tiene su proceso de muerte y renacimiento.

En el tarot en los arcanos mayores, está representada por el arcano 13 ilustrada como un esqueleto con la guadaña en mano, que ciega todo a su paso, según el tarot Marsellés. 


Dispuesta a dar fin a una situación determinada, para un nuevo comienzo, es lo inevitable que afecta a todos los seres por igual sin importarle sus condicionantes, ni de origen, ni jerárquicos, ni raza, ni religión, todos sucumben bajo el filo de su guadaña por igual. Tiene un paisaje árido donde el invierno se ha adueñado de las circunstancias, pero tras este cambio en primavera el ciclo de la vida vuelve a comenzar.
 Así también es en la vida diaria, ya que el tarot es el viaje espiritual que cada uno debe realizar para adquirir la maestría de la conciencia infinita.

Ya que esto son solo palabras como tantas otras escritas….por qué no tomarlo en un sentido práctico? en el que sabiendo que si ha de ser impostergable e ineludible y frente a tantas interrogantes, vivir cada instante sabiendo que podría ser nuestra última mirada a esta maravillosa existencia donde todo tiene vida y donde somos parte de una creación que camina hacia la eternidad, compartida con todos los seres que nos acompañan,  a veces el mirar  la muerte a la cara nos insta a vivir más intensamente, resulta una paradoja muy interesante para reflexionar…..



“¡Cuando la muerte se precipita sobre el hombre, la parte mortal se extingue; pero el principio inmortal se retira y se aleja sano y salvo.”
                                                                               
Platón (427 AC-347 AC) Filósofo griego.

“La muerte sólo será triste para los que no han pensado en ella.”

Fénelon (1651-1715) Escritor y teólogo francés.

“La muerte no es más que un cambio de misión.”

Leon Tolstoi (1828-1910) Escritor ruso.




domingo, 21 de agosto de 2011

LISA GUERRARD - NOW WE ARE FREE





Lisa Gerrard (Melbourne 12 de abril de 1961) compositora y cantante australiana. Integrante principal de la desaparecida banda Dead Can Dance. Ella es mejor conocida por su profunda voz de contralto. Su voz ha sido descrita como rico, asombroso, profundo, oscuro, triste y único. Su gama se extiende desde contralto dramática mezzosoprano en canciones como The Host of Seraphim, Elegy, Space Weaver y Come This Way. En las otras canciones Sanvean, Sacrifice, Largo y Not Yet, Gerrard realiza en el contralto dramática rango
Gerrard canta muchas de sus canciones, tales como Now We Are Free, Come Tenderness, Serenity, The Valley of the Moon, Tempest,Pilgrimage of Lost Children, Coming Home y Sanvean en un idioglossia (un lenguaje idiosincrásico) que ha desarrollado desde la edad de doce años.


jueves, 18 de agosto de 2011

EL VUELO DEL ALMA




Es la necesidad imperiosa de sacar al exterior lo que tenemos encerrado dentro, seguir nuestro propio camino, sin tener que ver con lo convencional ni lo establecido, pues generalmente lo que sale del alma es absolutamente innovador, creativo y se reinventa a cada instante.
Nos damos cuenta de que esto nos está pasando cuando aquello que decidimos hacer nos llena de felicidad y mas que ser una tarea, obligación o deber es algo que solo nos produce satisfacción, incluso frente a los desafíos más temerarios y adversarios prominentes.
Tiene que ver con el servicio hacia los demás y el trabajo en conjunto, es una actividad compartida con el resto del mundo en el cual hemos encontrado un lugar, nuestro lugar.
El vuelo del alma se manifiesta en aquellos seres en que libres de toda influencia caminan tras el sentir interno dotándolos de una plenitud especial que hace que los demás se detengan a observarlos, con admiración, con interrogantes, con prejuicios o hasta con envidias, pero ya nada los detiene, pues no portan las cadenas de los condicionantes.
Se mueven guiados por su propia luz, quizás sean poco comprendidos…pero quien posee total comprensión del comportamiento humano? Ya que hay tantas variantes como individuos.
La libertad del ser, ya carente de opiniones ajenas en la conciencia consigue una mayor expansión y comprensión, significando una mayor empatía con todo lo que lo rodea fenómenos naturales, situaciones, comportamientos, estando libre de los condicionantes  habituales pueden salirse de sí mismos y sentir en la piel del otro, atendiendo a las razones que se tuvieron a actuar de ese modo, sin identificarse ni tomarlo de forma personal.
Nos da un sentido de referencia naturalmente, recordando que todas las situaciones vividas indiferentemente de cuáles sean su condición (buenas o malas) han llevado hasta este momento presente, siendo lo que se es y habiendo obtenidos estos logros y con esta visión del mundo. Como todo, se necesita de una muy fuerte determinación para emprenderlo y no quedarse por el camino, porque las adversidades solo fortalecen el espíritu y refuerzan el deseo del alma de manifestarse, las personas que toman esta determinación no dudan, ni se pierden en inseguridades, saben lo que son, lo que tienen para ofrecer, así que simplemente levantan la vista hacia el horizonte y se dirigen sin vacilar donde su alma los llama.

A mis amigas del alma:

A Estela por enseñarme la maestría de la inocencia perdida y por creer siempre en mí.

A Cristina por serenar mi  fuerza instintiva del impulso y resonar como “campanitas”

A Adriana por entenderme en mi propio lenguaje y ser mi compinche en mis andanzas.

A Anita por ser una fuente inagotable de humildad y sabiduría.

También a Elbio por ser mi “pinche tirano” con el que he aprendido a lidiar con mis partes más oscuras y por su enseñanza constante.

Gracias! 

SOBRE EL AMOR (I)



Si  lo identificamos como un concepto abstracto nada más lejos de su esencia estaríamos. Lo abstracto sale del mundo de la mente y el amor es un sentir de naturaleza experimental y quien no lo haya sentido propiamente, difícil seria su explicación, trasladar ese estado que se manifiesta en el ser y nos traspasa generando un entorno en el que tocamos de alguna manera todo lo que tenemos a nuestro alrededor.
Se manifiesta de muchas formas en las que generalmente se distorsiona su esencia, pues en su forma más pura simplemente habría  que dejarlo ser, teniendo en cuenta que cada vez que se intente dominarlo, controlarlo, manipularlo, lo estamos perdiendo y termina transformándose en otra cosa.  Hablando propiamente sobre las relaciones de pareja, pasa a ser un tema bastante complejo ya que es donde más deformaciones presentan.
El enganche primordial de “enamoramiento” podría meternos en diversas situaciones en las que después difícilmente se podría salir bien parado. ¿Qué es lo produce ese enganche? Muy diversos motivos, empezando desde la soledad en que afanosamente se busca un par con quien compartir, es una necesidad muy humana ya que somos seres sociables por naturaleza, si bien todos no tienen las mismas armas y recursos para lidiar con ella(la soledad), puesto que esto dependerá de la propia riqueza interna del ser o el vacio interno que sintamos, además de la etapa de vida en la que uno se encuentra, ya que si nos agarra mal parados y conocemos a una determinada persona ese enganche podría ser producto de nuestro vacio interno y no propio del amor. También está la posibilidad del “espejo” lo que nos refleja o representa esa persona con la que nos sentimos diferentes, mejores y es natural querer seguir sintiéndonos así, pero  eso que vemos o como nos sentimos es nuestro, lo único que produjo esa persona es que encontró la forma de mostrárnoslo, siempre estuvo ahí, solo que no sabíamos como manifestarlo. El amor primero es interno para luego manifestarse en el exterior y quien no se ame a si mismo primeramente difícilmente podrá amar a otro ser. El hecho está en que todos creemos amarnos, pero las ideas solo trabajan en el mundo de las ideas y donde se ven las certezas es en los hechos, donde entran en juego el respeto por uno mismo primeramente, el lugar desde donde elegimos ser vistos y que nos vean,  las cosas que hacemos o no para nuestro beneficio y no por otros motivos externos, comprendernos en nuestros errores, perdonarnos puesto que desde la razón siempre se trata de hacer lo mejor posible, a veces nos sale, otras no pero tener ese derecho al error y a la enmienda es una forma de amarnos.
Lo que no hagamos con nosotros mismos, tampoco lo haremos con un tercero este en el lugar que hayamos querido darle en nuestra vida. Cada uno dentro de su individualidad es un universo creado,  de esta relación sale el  microcosmos representado por el hombre frente al macrocosmos que es el universo (Demócrito), siendo así se debe aprender a manejar nuestro propio microcosmos teniendo en cuenta que lo que nos damos a nosotros mismos es lo que damos a los demás. Esa es la primera manifestación del amor, de ahí puede surgir todo, principalmente el verdadero amor, ya que si no lo poseemos internamente hacia nosotros primero, podría desencadenarse en una dependencia absoluta del otro, en una sofocación y hastió de cualquier relación, esa sensación de no ser nada sin el otro, de vivir a expensas de un tercero, no solo nos quita identidad, también nos hace egoístas, dependientes, celosos etc.
La psicología  del sujeto también tiene su incidencia en nuestras elecciones, en enganches patológicos, repitiendo patrones a los que nuestra psique se ha acostumbrado, generando una dependencia difícil de soltar, que tengan que ver con nuestras historias pasadas.
El amor es identificable cuando uno no necesita una razón para sentir lo que siente, simplemente está ahí y nos hace sentir absolutamente completos, este la persona  a nuestro lado o no, tal vez no se haya comportado de la manera más correcta o no haya colmado nuestras expectativas, sin embargo el sentimiento sigue ahí intacto, dentro.
Aceptando al ser que tenemos delante, de la forma que es, sin querer “cambiarlo” pues sino solo estaríamos amoldándolo a nuestras formas y el amor es la aceptación plena del otro.
Frente a las diferencias el cuidado del otro o de uno mismo es esencial, en estos casos la distancia es una muy buena forma de entender lo que no se puede cambiar y es una muestra de respeto por uno mismo y por el otro.


lunes, 15 de agosto de 2011

MAESTRO… O FALSO GURU?


“Por un sinuoso camino y a gran velocidad, un hombre borracho conducía su carro. De repente, perdió el control del carro, se salió del trayecto y se precipitó contra una charca pestilente. Varias personas, al ver el accidente, corrieron al lugar y ayudaron a incorporarse al conductor.
No podía ocultar su borrachera y, entonces, uno de sus auxiliadores le dijo:
- Pero, ¿es que no ha leído usted el célebre tratado de Naraín Gupta extendiéndose sobre los efectos perjudiciales del alcohol?
Y el ebrio conductor, sin dejar de hipar, tartamudeó:

- Yo soy Naraín Gupta.”

El Maestro: así procede el falso gurú.

Basado en este cuento anónimo empieza la explicación y diferencias entre estas tan distintas posturas.
Comencemos diciendo que la humanidad a través de la historia ha demostrado que una necesidad inherente al ser humano  es la de “buscar un guía” alguien capacitado (mas que nosotros obviamente) que nos diga: hacia dónde ir, cómo, cuándo y de qué manera.
Lo peligroso de esto es que la mayoría de las veces no se “cae” en las manos adecuadas, pudiendo representar un destino incierto para nosotros, nuestro entorno, nuestros bienes etc.
Este viejo refrán lo refleja mejor: “en el país de los ciegos, el tuerto es rey”
Y más que tuerto lo que cuenta frente a ciertos personajes siniestros es la habilidad que poseen en la palabra, en la astucia que emplean sin el menor pudor, para envolver a cuantos se le acerquen.
En estos últimos tiempos es donde mayormente proliferan ya que hay una nueva oleada de gente que se preocupa por la espiritualidad como nunca antes había sucedido, ha llegado incluso a “estar de moda”.
Así de esta manera masivamente las personas se van incluyendo en religiones, sectas, grupos de meditación, sin el mas mínimo conocimiento básico de hacia dónde se dirigen.
Aquí es donde aparecen los falsos gurús pudiendo ocasionar un daño moral, espiritual y económico importante, ofrecen el camino “correcto”, “la salvación del alma” siempre sustentando sus argumentos de una manera muy hábil que difícilmente podrá ser refutada por quien vaya en busca de refugio en una situación de desastre en su vida, porque hay que atender a la razón por la cual un individuo se acerca a lo espiritual, y  no es porque su vida sea un lecho de rosas precisamente.

Con las defensas bajas y frente a tanta promesa ¿Quién podría resistirse?
La ignorancia es la base de todos los males, por eso se sugiere la investigación previa de el lugar al que se pretenda asistir, no en el lugar mismo por supuesto ya que en estos sitios el “Maestro” tiene su sequito de personas que llegaron antes que usted.
También sirve como recurso  útil el desarrollo del criterio objetivo, el cuestionar todo lo que se nos pase por la cabeza, atendiendo a que lo que se explique sea lógico y no un caso especial por el cual está atravesando el “maestro”. Pero lo más importante es que las normas establecidas no vayan en contra de su propio criterio, con prohibiciones, demandas ilógicas, lo que está en juego es su integridad espiritual y siempre hay un sentir interno que nos indica que algo está bien o mal, solo basta con detenerse a escucharlo y no acallarlo con voces externas.

Luego de pasada la persuasión para su ingreso y de las primeras experiencias, estos desagradables seres suelen empezar con las exigencias de todo tipo, incluso hasta la mención de sutiles amenazas disfrazadas en palabras que solo pretendan su bienestar futuro.
Es cierto que hay casos en que no son tan radicales y el poder no radica en una sola persona sino en varias o en determinado grupo, pero basta con ponerse a observar simplemente si en sus vidas personales actúan como predican, pues es muy sencillo enseñar a otros tal o cual cosa, pero se enseña mucho mejor desde el ejemplo.

¿Cómo hablar del perdón, o de la prosperidad, de la armonía de la comunión con todo y todos y su vida refleja lo contrario?

No es lo mismo conocimiento y sabiduría y la diferencia es más que gramatical y textual, son dos conceptos absolutamente de naturaleza distinta, ya que uno  es información abstracta de almacenamiento, mientras que la otra refleja un sentir interno puesto en práctica, desde la forma de obrar, la palabra y el entendimiento. Esta es la diferencia fundamental entre estas dos posturas.
Una persona que no posea la sabiduría que nace del sentir y del experimentar, jamás podrá enseñar absolutamente nada ya que es algo que se traspasa y no solo de forma oral, interviene la parte energética en la que se genera determinada seguridad que es percibida por los demás, donde no nos cabe la menor duda de que tenemos enfrente y sus palabras nos resuenan acorde a eso que internamente necesitamos.

El verdadero maestro no habla actúa,  pues quien mucho tiene para decir, sabe escuchar muy poco.
Los verdaderos maestros si existen y no son fáciles de encontrar, pero tampoco es tan ardua tarea, observemos a los que actúan tal cual predican en la sencillez de la verdad o la inocencia, pudiendo ser el vecino de al lado o tal vez esa viejita que siempre vemos en la puerta de la iglesia, en todos se manifiesta el ser interno que es el REAL MAESTRO, solo hay que saber prestarle atención.
No hay que dejarse llevar por grandes ostentaciones, ni supuestos grandes entendimientos, la sabiduría habita en cada ser, por eso unos aprendemos de otros todo el tiempo ya que todos somos parte de la creación y donde mayor habita la sabiduría es en la humildad.
Recordando que las religiones, las filosofías y demás dogmas solo nos muestran una ínfima parte del todo que es incognoscible, perdiéndonos de una visión más amplia, que cada uno juzgue por sí mismo.


¿POR QUÉ ENFERMAMOS? PARTE II - Por Lic. Adriana Occhiuzzi Falchi


En el artículo anterior establecimos que el hombre es una unidad, un todo, mente y cuerpo interactuando.
Y a partir de esta concepción surge la psicosomática, la cual tiene en cuenta el aporte de la medicina, del psicoanálisis, de la antropología y de la sicología.

¿Qué es entonces la psicosomática?
Es el estudio y tratamiento de pacientes con manifestaciones orgánicas de enfermedades.

¿Y por qué considerar el aporte de tantas ciencias?
Porque el ser humano nace, crece, se forma teniendo en cuenta que especialmente la primera célula que constituye esa sociedad, es la familia. Las enfermedades son pues trastornos psicofisiológicos, ya que aparecen como el resultado  de la combinación de diversas causas:

Biológicas
Psicológicas
Sociales
En las causas biológicas puede aparecer la influencia de factores hereditarios, que predisponen a una enfermedad. Aunque muchas veces esta herencia no existe, y la elección del órgano y por lo tanto de la enfermedad tienen que ver con el conflicto inconsciente que está presente y con las características del sujeto que lo presenta.

En las causas psicológicas encontramos los conflictos intrapsíquicos, las emociones, el modo de manejar la ira, la angustia, el dolor, las pérdidas, o sea su funcionamiento psíquico. Sin dejar nunca de vista la historia y la situación vital que atraviesa la persona.

Dentro de las causas sociales, encontramos varios factores:

El estar sometido en forma prolongada a situaciones adversas, ya sea afectivas, laborales, económicas, situaciones de pérdidas de familiares, amigos, de trabajo etc.
También vemos la influencia de los estereotipos de ideal que la sociedad maneja, por ejemplo el idealismo de delgadez y el rechazo a la gordura, hace décadas que se ha venido observando y se ha demostrado  su ascendencia en relación a la aparición de trastornos alimentarios, como ser la bulimia y la anorexia.
Así también la necesidad consumista que ha surgido, donde lo primero parece ser la satisfacción de todo tipo de necesidades. Satisfacción que conlleva a pagar “precios” afectivos, de salud, etc., precios que no se pueden o no se deben pagar. Y así pueden plantearse muchos ejemplos más que surgen de tratar de alcanzar a cualquier costo, todos los ideales que la sociedad en la que estamos insertos maneja.




Pero si vamos aún más profundo, a la célula primera, y si vemos que las exigencias de la sociedad pueden crear conflictos, enfermedades en el ser humano (sin dejar de lado la historia y las características de personalidad de cada individuo), podemos plantear cuántas mas influencias ejerce el grupo familiar.
Cuando un integrante es el que generalmente enferma, tenemos que preguntarnos:
¿Quién es el que enferma?
¿Qué o quienes lo enferman?
La enfermedad de uno en la familia tiene una razón, hay que ver por qué él y no otro es el que enferma y qué significado tiene esa enfermedad en ese momento y para ese grupo.
Enfermedad que en realidad es del grupo, no solo del que enferma.

Pichon Riviere dice: “Los conflictos emocionales de un sujeto, hecho aún  más claro en un niño y el adolescente, son un emergente de su grupo familiar. Con su conducta asumida el sujeto muestra, denuncia el acontecer grupal, el campo total en el cual está incluido con sus particularidades biológicas, su historia personal (por eso él y no otro aparece como emergente) y su percepción del proceso familiar, su particular manera de haber recibido y plasmado las demás influencias del medio externo (escuela, etc.) pero que particularmente el niño procesa psíquicamente de acuerdo a pautas y modelos aprendidos de su grupo familiar.
Por lo tanto con su sintomatología ese sujeto da cuenta que sus conflictos no son solamente de él, sino son de una totalidad, de una estructura, de su grupo familiar”

El ser humano reacciona pues como un todo fijando síntomas, enfermedades tipos de comportamiento. Hay entonces múltiples factores por los cuales una persona enferma.
Situaciones o factores que obviamente el sujeto no puede manejar o resolver, allí surge el conflicto y aparece el síntoma. ¿Cómo encarar entonces el tratamiento de esa persona que padece una enfermedad?
Con el tratamiento médico y con psicoterapia de forma simultánea. Como hemos visto, no se trata la enfermedad sino al ser humano que enferma, por lo tanto tenemos que atender:

La enfermedad desde el punto de vista orgánico (análisis, tratamientos, medicación) El paciente enfermo con su historia, su vida familiar, su situación vital actual y  su funcionamiento psíquico y esto lo hace la psicología desde la psicoterapia.
Con el trabajo conjunto, o en forma simultánea, podemos encontrar entonces la causa de la enfermedad, tarea que corresponde al médico y a través de la psicología, el sentido de la misma, sentido que como ya dijimos es inconsciente.
A partir de aquí es posible modificar el síntoma, o sea la enfermedad, atenuarlo y en muchos casos lograr la cura.